Wednesday, December 29, 2010

"Las posibilidades del verde" en La Palanca # 15

Geney Beltrán coordinó este número especial de cuento en la revista La Palanca.




Aquí pueden descargar la revista completa; está en pdf. La verdad, vale mucho la pena revisar este número de cuento.


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Los libros de Sergio González Rodríguez

en el suplemento del Ángel del Reforma (19 de diciembre).

Toda lista tiene una enorme carga de subjetividad (y en gustos, se rompen jetas), eso es indiscutible. Pero siempre causa una grata sorpresa verse entre la preferencia de un lector. Sobre todo de ese lector. Con un poco de retraso, comparto la feliz sorpresa. Enfermario, en la lista de los mejores libros que Sergio González Rodríguez leyó durante 2010.

19/Diciembre/2010
El Ángel de Reforma
Sergio González Rodríguez


El libro del año: La sociedad sin relato, de Néstor García Canclini.
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Novela: La prueba del ácido, de Élmer Mendoza; Sangre erguida, de Enrique Serna; Olvidar el futuro, de Agustín Ramos; En la vida triestina, de David Miklos; El retorno de los tigres de la Malasia, de Paco Ignacio Taibo II; Puedo explicarlo todo, de Xavier Velasco; Mi cuerpo en tus manos, de Rose Mary Espinosa; No tengo tiempo, de Arturo Vallejo Novoa; Hotel DF, de Guillermo Fadanelli.

Cuento: La marrana negra de la literatura rosa, de Carlos Velázquez; Señora Krupps, de Javier Hernández; Fiebre, de Daniel Krauze; El corazón es un gitano, de Rafael Pérez Gay; Sólo cuento, coordinado por Rosa Beltrán; Ese modo que colma, de Daniel Sada; El tiempo apremia, de Francisco Hinojosa; Caída libre, de Carlos Martín Briceño; Enfermario, de Gabriela Torres Olivares.

Crónica: D.F. Confidencial, de J.M. Servín; El derrumbe de los ídolos, de Héctor de Mauleón; Cuando me volví mortal, de Carmen Boullosa; El miedo ante el espejo, de Juan Villoro.

Ensayo: El XIX en el XXI, de Christopher Domínguez Michael; La brújula hechizada, de Mauricio Montiel Figueiras; Las islas de las tribus perdidas, de Ignacio Padilla; El arte de perdurar, de Hugo Hiriart; Islas y casi islas, de Bruno Hernández Piché; La increíble hazaña de ser mexicano, de Heriberto Yépez; Enseñanzas desbordadas, de Marisa Belausteguigoitia, et al.; Que se abra esa puerta, de Carlos Monsiváis; Papeles falsos, de Valeria Luiselli; Inmanencia viral, de Fausto Alzati Fernández.

Historia: De héroes y mitos, de Enrique Krauze; La revolución mexicana, de Álvaro Matute; La Castañeda, de Cristina Rivera Garza; La muerte entre los mexicas, de Eduardo Matos Moctezuma; Diré adiós a los señores, de Orlando Ortiz; El último brindis de don Porfirio, de Rafael Tovar y de Teresa; La insurgenta, de Carlos Pascual; México: Fotografía y Revolución, coordinado por Miguel Ángel Berumen.

Actualidad: Esclavas del poder, de Lydia Cacho; El general sin memoria, de Juan Veledíaz; Jauría: la verdadera historia del secuestro en México, de Humberto Padgett; La Santa Muerte, de José Gil Olmos; Los señores del narco, de Anabel Hernández.

Poesía: Morir mejor, de Feli Dávalos; Descripción de un brillo azul cobalto, de Jorge Esquinca; Sobre una hoja, de Gabriel Bernal Granados; La radio en el pecho, de Eduardo de Gortari; Población de la máscara, de Francisco Hernández; Libro del abandono, de Javier Acosta; Negro es su rostro/ Simiente, de Esther Seligson; Pastilla camaleón, de Julián Herbert.

Biografía: Granados Chapa. Un periodista en contexto, de Humberto Musacchio; Se llamaba Elena Arizmendi, de Gabriela Cano; Aquí está su pachucote... ¡Nooo!, de Rafael Aviña.

Humor: Historias desconocidas de la Independencia y la Revolución, de Trino Camacho.

Arte: El joven Orozco, editado por Adriana Malvido; Espejo en llamas, de Andrés de Luna; El arte de las ilusiones, de José Antonio Rodríguez; T.W. Adorno, de Jorge Juanes; Atrocitas fascinans, de José Luis Barrios.

Entrevista: La última entrevista a Roberto Bolaño y otras entrevistas a grandes escritores, de Mónica Maristáin; Catorce escritoras mexicanas frente a sus lectores, de Blanca Estela Treviño; La voz de los otros, de Ricardo Cayuela Gally.

Obras extranjeras: L'Ardore, de Roberto Calasso; La Carte et le Territoire, de Michel Houellebecq; El cementerio de Praga, de Umberto Eco; Teignmouth Electron, de Tacita Dean; Blanco nocturno, de Ricardo Piglia; Imperial Bedrooms, de Bret Easton Ellis; Obra poética, de J.M. Junoy; Requiem, de Sanford Kwinter.

El peor libro del año: Pobre Patria mía, de Pedro Ángel Palou, novela burocrática en la que monologa un Porfirio Díaz disfrazado de personaje de Carlos Fuentes: "fósil desenterrado, paleolítico, inmemorial. Soy blanco y oscuro. Verde y transparente como el jade. Opaco y luminoso. Soy, para mi desgracia, eterno... Soy el viento, el fuego, el agua, la tierra. Soy el sumo sacerdote, el yaha yahui, el águila-serpiente de fuego", etcétera. Lectura chatarra para supermercados.

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el 25 de diciembre, cumplí, oficialmente, la mitad de mi vida sin mi padre. Es un poco difícil la herencia de esta época. Pero me ha dado, además de una gran connotación de holidays, la excusa de su ausencia: entrar a las ligas mayores de la pérdida con foquitos de navidad. Esta suceptibilidad envuelta en papel para regalo, de listón el antónimo nacimiento de temporada.


Sunday, December 12, 2010

sobre un ser de doce años

Hace algunas semanas me preguntó si éramos mejores amigos. Le respondí que sí, sin pensarlo. Le enseñé cómo hacer serigrafía y juntos imprimimos algunas cosas, luego revelamos una pantalla con imágenes que a él le gustan: un símbolo de anarquía, un humanoide con cabeza de ojo, una batería, su nombre y una calavera. También le regalé una batería eléctrica que hace mucho ya no toco. Platicamos de episodios de Los Simpsons y me contó algunas cosas que yo ignoraba sobre la serie. Hablamos de caricaturas y de música punk, de sus clases y de literatura. Le relaté mis mejores cuentos, las ideas que aún no he escrito. Sonreía y me preguntaba si eso era cierto o me lo había inventado. Le dije que todo era cierto, al menos en mi mente.

Hoy paseamos por la playa. Le hablé de criptozoología y discutimos sobre animales reales y mitológicos. Le mostré cómo tocar el centro de una anémona parásito sin dañarla y sin ser atrapado por los pétalos carnosos. Comimos tacos de pescado y hablamos de Tim Burton y nuestras pelis y personajes favoritos, le dije que debía leer a Leonora Carrington. Caminamos por los pasillos de uno de mis lugares favoritos en este mundo: una segunda. Tomamos algunos juguetes, vimos peluches y herramientas, trastes y ropa y salimos con las manos vacías, cansados. Bebimos jugo de coco, le expliqué porqué no me gusta su sabor. Me dijo que My Chemical Romance era una de sus bandas favoritas; le respondí que compré su primer disco y después ya no me parecían tan suaves y él me recomendó este video: Gerard Way se ve súper cool con el cabello rosita, deberías verlo, remató con una sonrisa. Y yo llegué a casa para buscarlo en youtube, pues eso, pensé, es lo que hace una mejor amiga.



un videíto de Scissor Sisters que me encontré en Pitchfork y me encantó

Saturday, November 27, 2010

Vine a Tijuana

porque me dijeron que aquí había tocado la banda más importante de los noventas, unos tales, Nirvana.



Videos tu.tv



Y los he buscado en las calles. En los afiches humedecidos de engrudo sobre las paredes. Y ésta y la cabeza afirmativa de un amigo, son mis únicas pruebas.

Thursday, November 25, 2010

Una de mis personas favoritas habla de uno de mis personajes favoritos.

Laura Albert conocida por su personaje de JT LeRoy, en vivo en The Moth @NYC el día de su cumpleaños (2 de noviembre).




Esta historia yo la sé porque he tenido el gusto de conocer a esta gran escritora y de tener breves charlas con ella e intercambiar cosas. Una mujer inteligente, divertida, crítica, ficcionista nata, contadora de historias, creadora de personajes, una mujer a la que admiro y de la que próximamente tendré oportunidad de escribir. Laura Albert es una chingona y me ha enseñado y dado un montón de cosas en mi vida. Si la literatura no fuese un oficio reconocido por los siglos de los siglos, habríamos por el mundo, grupos de Mentirosos Anónimos. I love Laura Albert and I really love Jeremiah Terminator LeRoy. They're a very important part of my life as a writer.

Monday, November 22, 2010

Wednesday, November 17, 2010

остранение -oatmeal stout-

Algunas imágenes del proceso completo de hacer cerveza. Hervir la cebada, maltearla, verificar la densidad y temperatura, alcohol, etc. Aunado a diseñar una imagen e imprimir las etiquetas de nuestro precioso producto. La cerveza se llama Ostranenie (sí, ¡qué vivan los rusos y sus teorías!), la imagen de la oatmeal stout es la perrita Laika y nuestro eslogan es: Ostranenie, la desautomatización del sabor. Enjoy!









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Friday, October 22, 2010

Boyfriend, Best Coast

'Crazy for you [Mexican Summer]' es uno de los discos más entrañables del 2010, y este familiar video, cuya rolita (Boyfriend) es parte del primer LP de la banda. Enjoy! Sweet fifteen a lo mexamerican... la pura raza de oro.









Wednesday, October 20, 2010

los acentos norteños no son todos iguales, dear.

Fue la excusa ramificada. Quizá el gusto de la mano que a lo lejos se agita. La labor, el oficio: seguramente. El regreso y la huída oportunos. Una lectura aristotélica. La amistad: inexorable pretexto el departir el pico de una botella. Risas. La desautomatización del café (el mejor del DF según el análogo cálculo de su crudo duelo / subjetiva matemática) por la mañana mientras se lee el periódico de dos países. 33 mineros a la superficie. Alegría fue el vilipendio cariñoso de unos motes. Un flan en la resaca me devolvió el corazón a su lugar (adjunto: mondadori en cincuenta pesos), o tal vez fueron los tacos de canasta con los que celebramos que existas en el viejo continente. Debajo de la lengua pocos nombres, ¡salud por ello, putarraca! Otras risas. Que si que no que la piel de gallina al sonido de una orquesta: la heredad. Alguien muere, siempre, para poder disfrutar del monto. Eso es la transmigración, hubo un recuerdo en sacrificio, te dije mentalmente. Celebramos todas y criticamos las que no (los setlist no son perfectos, serían oximorónicos). Probablemente cruzaría la Vía Láctea con el solo objeto de descontextualizar la machaca (tráfico de chiltepín anexo).


Tuesday, October 05, 2010

si usted anda estos días por el DF...


sólo nos queda un lugar (por el cupo máximo) aunque ya estamos complet@s. Si le quiere entrar, comuníquese a mi correo: fitna82@gmail.com o a rocio_ceron@yahoo.com

Albañilería editorial

-encuadernación creativa / impresión alternativa-

Fecha: 7, 8 y 9 de octubre de 2010.

Duración por sesión: 3 hrs.

Jueves y viernes de 18:00 a 21:00 hrs y sábado de 11:00 a 13:00 hrs.

Albañilería editorial está dirigido al público interesado en técnicas alternativas de impresión y encuadernación, manufactura de publicaciones caseras, producción de libros de artista y libros objeto. Durante tres sesiones intensivas de técnica y práctica, el tallerista aprenderá a encuadernar libros por distintos medios: goma, dobleces, cosidos y cortes. También aprenderá a revelar una pantalla de serigrafía, a manufacturar sellos con corchos de botellas y/o placas de polímero y a tamizar tinta en distintos soportes por medio del esténcil y la malla serigráfica.

Sesiones.-

Jueves 7:

· Introducción a las técnicas de doblado, corte y manipulación del papel.

· Publicaciones sin pegamento: Panfleto origami - Lollipop stick book - cuaderno al listón.

Viernes 8:

· Publicaciones con pegamento e hilo: Cosido sencillo a dos cortes – Encuadernación con goma.Tipos de impresión calcográfica. Manufactura de sello de corcho y/o polímero.

Sábado 9:

· Impresión calcográfica: Esténcil. Preparación y revelado de pantalla de serigrafía casera. Práctica de impresión de serigrafía.

Thursday, September 30, 2010

y en otras noticias...

ya quedó mi librito en FETA. La portada es de Daniel Aguilar, talentoso morro cuyo trabajo encuentro muy empático con mi jale. Pueden adquirirlo en su EDUCAL más cercana y no sé en qué otras tienditas y si no tiene idea de en dónde, escríbame un correo y yo le instruyo, sin compromiso.


Este libro no habría sido posible sin la ayuda del talentosísimo Geney Beltrán y de la creativísima de Mónica Nepote. También gracias a Rayo Ramírez por su paciencia y a Diana Palaversich por coescribir un par de cuentos mentales conmigo. Pueden leer gratis el cuento "Maceta de Carne" aquí.
Si lo compra y no le gusta, no hay reembolsos pero cuando me vea podrá patearme y me dejaré.

Té de sol / Sun tea

Una forma sencilla, deliciosa, barata y ecofriendly de hacer té helado casero. Enjoy!

1.- En un galón de agua purificada, pon 1/4 de taza de té (a granel) o 6 bolsitas. El sabor del té es al gusto, yo prefiero el té negro y el verde, por ejemplo, pero el de yerbabuena también sabe chido sin azúcar y refresca un montón y regula el sueño.

2.- Si el té es negro o de un sabor amargo o muy fuerte puedes ponerle algunas rodajas de limón, de preferencia cortar menos de dos limones para que los limones no protagonicen el agua.


3.- Debes agitarlo muy bien para que las hojitas se revuelvan de manera homogénea con las rodajas de limón.


4.- Debemos ponerlo a resposar al sol.



5.- O bien, colgarlo en el tendedero o alguna varilla o cosa que cuelgue en nuestro patio o en la calle o en la ventana o en cualesquier lugar donde el sol le pegue directamente por dos horas.

6.- Luego lo endulzamos con un poco de miel (si queremos endulzarlo) al gusto, yo le puse 1/3 de taza de miel.


7.- Y lo metemos al refri a que se enfríe por unas horas, para posteriormente empujárnoslo.



ojo: El té negro y el verde tendrán el mismo efecto de cafeína que en una infusión, así que tomen sus precauciones.

Thursday, September 16, 2010

Wednesday, September 08, 2010

si de casualidad o por culpa del destino anda usted hoy en Tijuana...




Yo ya tengo mi ticket, ¡yiiiiija!

Tuesday, August 31, 2010

The Wilderness Downtown

We used to waste hours just walking around

We used to wait
[...] Now our lives are changing fast
Hope that something pure can last.
A.F.


Si tuvieras la oportunidad de mandarle una carta a quien fuiste en tu niñez, ¿qué le dirías?

Tom Breihan, en el sitio de nuevas tendencias y noticias musicales, Pitchfork, dice que hay un extraño impulso de nostalgia conflictuada para quienes vivimos lejos del lugar en el que crecimos: las constantes visitas virtuales al Google Earth. Previo a leer esto, pensaba que el mío era un vicio oscuro que jamás revelaría, mismo que tenía que ver con mi apostura del cambio geográfico (con el que me siento bastante satisfecha), mi relación con Google Earth y una necesidad de viajar entre imágenes predeterminadas por la simple sensación de recorrer los espacios de mi niñez sin tener que hacer un viaje de 2,200 kilómetros. He realizado estas visitas cuando en las noches no tengo nada que hacer, o cuando escribo y quiero tener un refresh de mi memoria o sencillamente porque a veces necesito recordar a la señora que aún vende tostadas afuera de mi antigua secundaria (señora que siempre se encuentra congelada, sirviendo salsa en una eterna tostada).


Esta tecnoañoranza, que de inicio pareciera bastante retorcida, no es más que una evolución de la nostalgia y su inmediatizada cura al alcance. Una amiga me dijo hace poco, que a veces cuando va manejando, o en su trabajo o cuando interactúa con alguien, tiene la constante necesidad (que, por fortuna, sólo practica en su mente) de un Ctrl+z. Se dice, a sí misma: control zeta, control zeta, control zeta. Otra amiga, en su fiesta de cumpleaños, comentó que igual que en Facebook quisiera tener un botón de I like this en la cotidianeidad para evitar emitir una opinión sobre lo que le gusta de la vida y lo que no: así si no pulso el botón de que me gusta, es porque obviamente no me gusta y viceversa. Yo me burlé en ambos casos. En el primero, recordé una frase de Oscar Wilde que dice que la experiencia es una acumulación de errores; con un Ctrl + z, ¿el mundo viviría en un oscurantismo involutivo por la falta de experiencia y la repetición de errores borrados? En el segundo caso dije que no me gustaba la idea del botón porque disfruto decir cuando algo no me gusta y viceversa: ¿dónde queda, entonces, mi criterio y su justificación? ¿Qué pasaría con la retórica y el discurso si ya todo queda implícito por los siglos de los siglos office? Pero esto es solamente un efecto de nuestra generación Marshall McLuhan. Igual que la nostalgia en Google Earth.

Afortunadamente, para la nueva generación de videoastas y para quienes somos diletantes del video y la música, Chris Milk ha realizado un salto cuántico en la linealidad (por más experimentales que éstos sean) de los videos musicales. Fundió letra, música, video, animación e imágenes topográficas en la plataforma de flash con el soporte de Google Earth. Esto (que no es un video, como bien asevera Tom Breihan) convierte el sonido de We used to wait de Arcade Fire en un cúmulo de virtuales sensaciones personalizadas. Sólo se necesita una banda lo suficientemente ancha y utilizar el explorer Google Chrome o Safari para disfrutar de la experiencia (en el caso de Firefox + wireless lejos del módem, el video se inhibirá. También es importante no cerrar la ventana mientras vemos el video pues son distintos pop-ups que inevitablemente pierden su correcto orden).


Milk no ha inventado nada. Los soportes estaban y esta tecnoañoranza es un común denominador en nuestra generación (sobre todo para quienes vivimos lejos, aunque es aplicable también para los románticos melómanos que gustan de recordar ciertos lugares al tiempo que escuchan una canción), pero eso es lo que hace un artista que ordena el caos de la memoria colectiva y la simula para shockearnos personalizadamente. Sólo basta ir a la página de The Wilderness Downtown, introducir la ciudad que nuestro masoquista antojo le quiera poner al sonido de We use to wait de Arcade Fire y esperar a que se cargue para, posteriormente, sólo presionar play. El viaje comienza con alguien vestido en jeans, converse y una sudadera con capucha (oh, my: esto en mí lo personalizó aún más) que corre por la ciudad que elegimos; las sombras de unos pájaros que inexorablemente bajan el vuelo para deslizarse en la topografía de Google Earth de nuestro barrio o ciudad añorada; paneos y zooms al ritmo de la canción para sentir el recorrido (literal) y una página en blanco que nos pide escribirle una nota a quienes solíamos ser para que, posteriormente, los pájaros que nos han acompañado en el viaje, se posen sobre las ramificadas letras de una carta a nuestro pasado. Ñoño, sí pero un ejercicio necesario.

Con apostura puedo sentenciar que The Suburbs de Arcade Fire es el mejor disco que he escuchado en muchísimo tiempo (y considero que es su mejor material hasta ahora). Alguien, en un sitio, mencionó que The Suburbs es el OK Computer de nuestra generación. No sé, creo que es mucho mejor, tomando en cuenta que no soy tan partidaria de Radiohead como lo soy de Arcade Fire. Y no puedo esperar para verlos en menos de seis semanas.

Definitivamente genial de Arcade Fire y excelente por Chris Milk. Alguien tenía que manipular nuestras sensaciones bien encausando la añoranza Google Earth.



[Aquí la rolita para quien nunca la haya escuchado]


Arcade Fire - We Used To Wait by user39221

Monday, August 30, 2010

Penny Sparkle de BRH


Uno de los discos que más me ha marcado como ser humana es el Misery is a butterfly de los Blonde Redhead. Hace algunos años, cuando gracias a una amiga, por primera vez los escuché, quedé súper in love. Lo siento, soy muy auditiva y de Elephant girl dependió mi vida muchos días. Tengo lindos recuerdos de las cosas que ocurrieron mientras disfrutaba de la miseria es una mariposa. Escribí algunas cosas con ese disco como soundtrack. Es probable que tuviera en el entonces una dramática y pasional relación con la vida y los BRH estaban ahí, aderezando mi shakespeareano amor con partículas de sonido. Años más tarde, salió "23". La vida y yo fracasamos nuestra domesticada relación pasional. La rutina del drama se fue agotando, me daba hueva pensar en la complejidad gratuita / drena energía. "23" ocurrió como todas las brisas en las playas del Pacífico sur ese verano: deliciosamente olvidable.


Hoy escucho el Penny Sparkle, leo algunos correos de buenas noticias y viajes e imagino lo que voy a recordar cuando escuche esta canción en el futuro. Buen disco el Penny Sparkle. Un recuerdo del porvenir, aquí a veces.

Monday, August 23, 2010

Dos Heridas


by Chris Diken / Robbie Guertin / Sara Jones

disponible en Printed Matter




Friday, August 20, 2010

Si usted anda este sábado 21 de agosto por la hermosa Tijuana no dude en asistir a...




Lugar: Grafógrafo: Libros y Café.

Día: Sábado 21 de agosto.

Hora: 19:30 hrs.

Dirección: Pasaje Rodríguez, en Av. Revolución entre calles 3ra y 4ta. Tijuana, Mexico.



Janice Lee. Escritora, artista, curadora y editora cuyos principales intereses se encuentran en las relaciones entre la metáfora de consciencia y la teoría neurocientífica.
Parte de su trabajo puede encontrarse en las revistas Big Toe Review, Zafusy, Antennae, Sidebrow, Action, Yes, Joyland, Luvina y Black Warrior Review. Fungió como editora asociada de Les Figues Press y fue co-directora de la hoy extinta publicación de literatura experimental, “Pulp”. Su primer libro, Kerotakis (Dog Horn Publishing, 2010), es una exploración multidisciplinaria que aborda ciborgs, neuronas y cortes de consciencia. Obtuvo la maestría en Escritura Creativa en CalArts y actualmente vive en Los Ángeles en donde es co-curadora de la serie de lecturas feministas, “Mommy, mommy!”, co-editora de la publicación online [out of nothing] y co-fundadora de la organización de artes interdisciplinarias, “Strophe”.

Para leer + sobre el trabajo de Janice Lee puedes accesar a su página dando click aquí.


Para llegar al Grafógrafo y disfrutar de este y otros eventos haz click en la imagen debajo para agrandarla.



WHY ‘FEMINISTS’ NEED TO READ JANICE LEE’S ‘TEXT’

BY MAXI KIM

When Janice Lee asked me to write something about her new book KEROTAKIS (2010 Dog Horn Publishing) my first instinct was to say no. Because quite frankly, I thought, Janice’s brilliant book spoke for itself. But after reading some of the reviews and high praise for KEROTAKIS, I feel compelled to add something to the discussion that might otherwise be lost. In “The Android and The Human,” an essay that Philip K. Dick wrote at the time of his research into “mind-in-becoming”, he remarks: “Cybernetics, a valuable recent scientific discipline, articulated by Norbert Wiener, saw valid comparisons between the behavior of machines and humans – with the view that a study of machines would yield valuable insights into the nature of our own behavior. . . .But suppose the use of this analogy is turned the other way. Suppose – and I don’t believe Wiener anticipated this – suppose a study of ourselves, our own nature, enables us to gain insight into the now extraordinary complex functioning and malfunctioning of mechanical and electronic constructs? . . . Rather than learning about ourselves by studying our constructs, perhaps we should make the attempt to comprehend what our constructs are up to by looking into what we ourselves are up to.” It is precisely against this background that I’d claim that future, yet-to-be becoming feminists... [leer más]

Wednesday, August 11, 2010

Experimental Dental School





+ de X D S





Friday, August 06, 2010

Montañas beyond montañas (extensión 2 o el juego del fuego negado)

A PLK y AOGB y JED

Sometimes i wonder if the world's so small, can we ever get away from the sprawl?
Living in the sprawl [...] Quit these pretentious things and just punch the clock.
[...] I needthe darkness someone please cut the lights.

A.F. Sprawl 2



Decidimos que telepáticamente tendremos una borrachera involutiva. Es decir lo primero no es lo primero y acabaremos en 1999 malfumando un porro y escuchando el one hit wonder de los New Radicals. Finjo que sé que se: mi sudor: el agrio de muchas brown ales; ¡cómo odio la cerveza clara! (y sin embargo): sí, a veces: pero de todas formas. ¡Bah!

Contoneo noventero hacia su oreja y grito un lamento de me gustaría volver a las drogas. You cannot. Salivosa ríe y me felicita por tan peculiar puntada. No bromeo. I mean: I cannot. Imagino una carretera; siempre imanto la verticalidad como la clase baja en un plano cartesiano (la clase: desciende eterno presente: la carencia). Cómplices bailamos nuestra danza ritual de los nacidos bajo el signo chino de un perro: 1982 (ó 1962 que veinteaños no es nada). Nos mascoteamos la mollera que nunca cicatrizó y entonces, generalmente, el percance. Aquel era el bar de los treintañeros exitosos. Los que trabajan en una oficina y no tienen hijos y creen que lo han hecho bien todo y que merecen una cerveza importada: arremangadas las camisas del uniforme de la empresa tal. Y se embriagan y cantan e intentan recordar el estribillo de esa canción de Guns n' Roses cuando (¡uh!) hace mucho del baile ése y alguna vez pensé que mi existencia cambiaría el curso de la humanidad y heme aquí: arremangada la camisa de la empresa tal intentando recordar que lo merezco. Pero bueno. Bueno bueno bueno. Y tal.

Yo prefiero que el mundo una arquitectura nimia y la agorafobia ordenada en tetris: dentro de una caja de zapatos escolares. Hemos hablado mogollón de España y mola. Terminaremos dos semanas después en algún jardín de iluminados y que si la alquimia y el caldo y la alquimia un caldo todoslosdías que no sé qué. Te confieso que la moebius de mi columna me pellizca constantemente la ciática. Tú, anfitriona de un programa de cocina. Un programa de radio mental entre lo cariado de la boca: ¿por qué los dientes? Lo primero no es lo primero. Hace mucho, en 1999 yo pensaba que el mundo acabaría y tú ganabas un premio por tu novela. Con apostura usé muchas drogas en los parques de mi barrio: la gravedad me recordó que estaba sola en un subibaja con el culo dolido de tanto cascajo (de que nada me subiera siempre). Dije que usé muchas drogas porque creí que el mundo acabaría, lo prometió el canal cinco.

Reímos (sí, mucho, muchas veces). Una carcajada cosplay que llega a casa y se desmaquilla el oriente frente al espejo. Agradezco en un speech esponsoreado de muchas y diversas ales. Gracias al mundo esta capacitación en nada. Sabemos, amigas mías, hasta ahora que podemos vivir perfectamente con nada. Siempre.